Concentrador de Oxígeno de 5 LPM KSN-5

¿Qué es la hipoxia?

La hipoxia es una condición en la que el cuerpo no recibe suficiente oxígeno para funcionar correctamente. Puede ocurrir por diferentes razones, incluyendo altitudes elevadas, enfermedades respiratorias, problemas cardíacos, obstrucción de las vías respiratorias, entre otros. La hipoxia puede afectar a diferentes sistemas del cuerpo y puede ser potencialmente peligrosa si no se trata adecuadamente.

Algunas medidas generales y específicas que pueden ser tomadas para tratar la hipoxia:

• Suministro de oxígeno suplementario: En casos de hipoxia, se puede administrar oxígeno suplementario para aumentar los niveles de oxígeno en la sangre y en los tejidos. Esto se puede hacer mediante el uso de máscaras faciales, cánulas nasales, o en casos más graves, mediante ventilación mecánica.
• Tratamiento de la causa subyacente: Es fundamental identificar y tratar la causa subyacente de la hipoxia. Esto puede incluir el tratamiento de enfermedades respiratorias como la EPOC, el asma, la neumonía, entre otras, o la corrección de problemas cardíacos que puedan estar reduciendo el flujo de oxígeno a los tejidos.
• Aumento de la presión parcial de oxígeno: En casos de hipoxia debido a altitudes elevadas, el descenso a altitudes más bajas puede ayudar a aumentar la presión parcial de oxígeno en el aire y mejorar los niveles de oxígeno en el cuerpo.
• Maniobras de descompresión: En casos de hipoxia causada por descompresión rápida, como en el caso de la enfermedad de descompresión (buceo), se pueden utilizar cámaras hiperbáricas para aumentar la presión parcial de oxígeno en el cuerpo y eliminar el exceso de nitrógeno.
• Medicamentos: En algunos casos, se pueden utilizar medicamentos para mejorar la función respiratoria, dilatar los vasos sanguíneos y aumentar el flujo de oxígeno a los tejidos.

Sobre el producto:

Concentrador de oxígeno para uso en instituciones médicas o centros de salud con capacidad de atención médica para pacientes con hipoxia. Previsto para su uso en adultos y niños por médico profesional o pacientes capacitados.

Este aparato utiliza principalmente el aire como materia prima y utiliza el proceso de adsorción de oscilación de presión de tamiz molecular para producir O2, con concentraciones que van desde 90% a 96(V/V)